Se va acabando el mundo de a
pocos; de la misma manera se va construyendo.
A la mano que ara la golpea la
mano que empuña; a la mano que empuña la sujeta la mano que grita; a la mano
que grita la invisibiliza* la mano que acalla; a la mano que acalla la burla la
mano que escribe... y así se va sucediendo una serie de muerte y vida; el fin y
el principio día tras día. El mundo se iba a acabar y así fue en muchas partes;
otro mundo estaba naciendo en otros lados y quizá algunos pensábamos "todo
es igual" (el mundo se está acabando hace rato).
Es desesperanzador no dar ni un paso, porque
la fuerza que destruye no cesa de roer lo que la otra fuerza construye; pero...
¿si se deja de construir?, ¿si se deja de arar, gritar, burlar...?, sólo
quedaran los huesos y "días de oscuridad". No se obra para el
derribo; se hace porque vale la pena... una sonrisa, una semilla, un poema, un
nuevo atardecer, un beso, una vida más... se hace porque la indiferencia es destructora
y el destructor desolado... se hace porque nace; porque a veces la fuerza
constructora que hay en uno mitiga y doma a la fuerza destructora que la
acompaña....
Quizá la guerra se dé cuenta que
es inútil; y la mano que fabrica la bomba se enamore de la mano que le dice
!Alto!; y los tronos de oro se usen de comedores comunitarios; y los
"piadosos" que rezan se conviertan en piadosos que actúan... o Quizá
algunos dejamos de ser románticos y "ponemos los pies en la tierra" y
nos dedicamos a nacer, trabajar, consumir y morir.
Alimentamos los sueños que nos
mantienen en pie; porque aunque estamos acostumbrados a que la guerra no ceda,
no permitimos que nos arranquen lo que nos queda: El mundo; rumiado y esputado;
el mundo aún inacabado… el mundo por construir.
Construimos así sea una estrofa,
procurando más vigor que la estrofa destructora, para mover el mundo por lo
menos una palabra que se convierta en canto y así esto no acabe aquí.
P. A.
P. A.
No hay comentarios:
Publicar un comentario